facebook
Twitter
Google +
YouTube
Unos largos ochos años y parece que fue ayer. 7:30 de la noche, El Poliedro De Caracas, Venezuela, 59 – 57 finalizado el tercer periodo Nigeria arriba en el marcador sobre la Republica Dominicana. A tan solo diez minutos para el pase historico de por primera vez una clasificacion a unos juegos olimpicos. El escenario, el aura, el momento, proyectaban un triunfo para el conjunto de Quisqueya.
Una portentosa linea frontal liderada por un jugador estrella en el mejor baloncesto que se juega en el mundo, la liga NBA, Alfred Joel Horford Reynoso. Acompañado de la estatura y el fisico de Josh Asselin, la veterania del Jack Michael Martinez, los catedraticos fundamentos de Eulis Baez, y un novicio jugador de apenas diez y seis años de edad pero con la estatura, la agilidad, y el fisico para ofrecer two o tres minutos considerables de ser necesario, su nombre Karl Anthony Towns Jr, estaban a la disposicion de un dirigente de baloncesto Salon de la Fama, John Vincent Calipari.
Desafortunadamente no pudo ser. La tan cercana furgurante iluminacion en las puertas de entrada a una clasificacion de juegos olimpicos, opacaron por completo la vision sublime de un elenco de jugadores Dominicanos ausentes de la preparacion emocional para manejar los resultado positivos que generaria este inalcanzable objetivo. Un hambriento combinado de Nigeria con todas las herramientas para embrazar la ocasion, pisoteo a sus antojos al combinado Dominicano en un desigualdado cuarto periodo, superandolo por 13 puntos, 29-16, y de paso otorgandole una primera clasificacion a toda la region Oeste del continente Africano.
Ochos años han transcurrido y ese sueño olimpico para un combinado nacional de baloncesto de mayores de la Republica Dominicana, se ha desvanecido en su totalidad, ya ni siquiera figura ni en las mas infrecuentes aspiraciones de la gerencia que rige el baloncesto Dominicano, ni en ninguno de los sueños de sus 10 millones 600 mil habitantes.
Con una suerte necesitada se pudiera volver a construir una linea frontal similar a aquella formidable desplegada por el combinado nacional Dominicano en el Poliedro de Caracas Venezuela en el mes de Julio el año 2012. Se necesitaria un desarrollo casi perfecto de estos tres jovenes prospectos Dominicanos, de aproximadamenete 7 pies de estaturas cada uno, y aspirar a una clasificacion juegos olimpicos 2024. Rafael Castro, Joel Rosario, y Rey Abat.
La respuesta es NO. Ninguno de estos tres jugadores presentan las cualidades ni las condiciones para llegar a ser jugadores a considerar por una franquicia de la liga NBA. Jugadores de primera Division de categoria mediana en el baloncesto de la NCAA, ausente de los requisitos para conformar parte en un roster de universidades de primer estirpe como lo serian North Carolina, Kansas, Kentucky, Duke, Florida State entre otras, y es aqui donde se presenta la ventaja de tenerlos como piezas a incluir en un combinado nacional Dominicano, no disfrutaran de las riquezas contenidas en los extravagantes contratos millonarios que les son ofrecidos a los jugaddores NBA los cuales les complican las participaciones en eventos internacionales donde arriesgarian una lesion que les pudiera afectar sus carreras de jugadores de baloncesto en la mejor liga profesional en el universo.
El gigante Joel Rosario ya curso su primer año de baloncesto NCAA con la universidad Fordham, de mediana categoria dentro del sistema Division 1 NCAA, pero compitiendo versus jugadores de primer cartel como lo es Obi Toppin, jugador del año NCAA 2019 – 2020, y pronosticado a ser uno de los primeros 7 jugadores a ser escogido en el proximo draft NBA 2020.
Con la excepcion de la Universidad Seton Hall, una universidad de primera categoria dentro del sistema NCAA de primera Division, oferta esta la cual no le seria conveniente aceptar, tendria que sentarse en la banca y esto afectaria su desarrollo, el jugador Dominicano Rafael Castro ha recibido un sin numero de ofertas de beca de universidades de primera division de categoria mediana, entre ellas la universidad Dayton, Virginia Commomwealth, la universidad Massachussetts, y hasta de la universidad Fordham donde milita el tambien Dominicano Joel Rosario.
Rey Abat es el jugador que presenta las posibilidades de mayor crecimientos entre estos tres jugadores. Los vaticinios son de que este jugador podria alcanzar la estatura de unos sietes pies y una pulgada de estatura. Tambien son los reportes de que Abat es el jugador que necesita la mayor cantidad de trabajo para poder desarrollarse como un jugador de condiciones requeridas para conformar un combinado nacional de baloncesto de mayores de la Republica Dominicana.
Suerte en sus desarrollos, Rafael Castro, Joel Rosario, y Rey Abat, aqui ocurriria el despertar de un sueño olimpico para el baloncesto de la Republica Dominicana, la estatura y el corpulencia fisica adecuada necesaria para avanzar a clasificaciones en los exigentes eventos FIBA.
Seguir: @DomiAROyBALON
